Al parecer existe un acuerdo bastante mayoritario -Chile, España, OCDE- en que internacionalizarse es casi una obligación que deben acometer todos aquellos que inician una actividad empresarial, y con mayor razón las empresas ya establecidas, pues les va la supervivencia en ello. Hoy no solo se produce para el mercado interno, sino que también se busca impactar en potenciales consumidores repartidos por diversas partes del globo terráqueo.
Así, España, no obstante aparecer en el puesto 142 de 189 naciones de la clasificación del Doing Business 2014 en cuanto a sus condiciones para montar una empresa, ha ido haciendo algunos cambios para acercarse a la media de la OCDE adoptando medidas que simplifiquen emprender un negocio. El pasado 1 de enero entró en vigor la plataforma Emprende en 3, que persigue abreviar el proceso actual pasando de los 12 pasos que se realizan hoy para crear una sociedad a solo uno y de los 23 días a 3. Estas gestiones podrán hacerse por vía telemática que coordinará las tres Administraciones, Central, Autonómica y Municipal.
Chile: empresario en 24 horas
En Chile, hasta antes de mayo de 2013 constituir una sociedad tomaba 28 días; no éramos los más atrasados, pero estábamos en una posición que superaba ampliamente los 11 días promedio entre miembros de la OCDE. Recientemente, el pasado mayo, entró en vigor la Ley 20.659 «Empresa en un día», que habilita un portal online para crear empresas en menos de 24 horas, en un trámite acortado y sin coste para sus promotores.
Los resultados están a la vista. Las nuevas compañías constituidas en 2013 alcanzaron una cifra récord de 85.452 entre enero y diciembre. Este resultado se explica entre otras motivaciones por la participación de las sociedades fundadas a través del sistema «Empresa en un día», responsable del 24% de las nuevas sociedades, que ascendieron a 20.678 en los ocho meses transcurridos desde su puesta en marcha.
El sistema chileno permitió en un comienzo la creación solo de sociedades de responsabilidad limitada; en octubre se agregó la empresa individual de responsabilidad limitada (EIRL). En junio de 2014 se sumará a «Empresa en un día» la sociedad por acciones. El objetivo es que a junio de 2016 sean seis las modalidades societarias que puedan constituirse en línea. Hay más. «Empresa en un día» permite abrir una cuenta corriente en un banco, de momento hay negociaciones avanzadas con varios de ellos.
Resumiendo, entre las gestiones que podrán hacerse por este régimen están: obtener una cuenta, el certificado de zonificación digital, que hoy día solo se puede hacer en algunas comunas, y obtener una patente comercial.
La Alianza del Pacífico emprende
El capital medio de las pymes que se han formado «en un día» alcanza los 5.300 euros. El 50% de los usuarios son emprendedores jóvenes de entre 18 y 35 años, concentrándose en Santiago el 50,25% de las nuevas empresas. El 66,5% de los socios son hombres y el 33,5% mujeres. Entre los datos llamativos resaltar que el 15% de las sociedades se organizan entre la media noche y las seis de la mañana.
En Doing Business 2014 se incluye una tabla que mide la actividad empresarial en 162 Estados, presenta cifras de nuevas empresas registradas por cada 1.000 trabajadores en edad activa (15-64 años). Las unidades de medida son empresas formales y privadas de responsabilidad limitada nos encontramos que en los primeros 20 países en los que se apunta una mayor actividad empresarial está liderada por Reino Unido con 455.600 firmas asentadas; también figura España con 84.399 y curiosamente los cuatro países de América Latina mejor posicionados son Perú (11), México (14), Chile (15) y Colombia (16) (Alianza del Pacífico en tercer puesto): totalizan 274.243. El que más, Perú, con 74.145; luego México, con 68.666; Chile, 68.439, y Colombia, 62.993, uno de los bloques más activos comercialmente hablando.
Las facilidades para hacer negocio son uno de los factores que más suelen tenerse en cuenta por quienes inician el camino exterior. En estos últimos años los países que han optado por integrarse al mundo han ido acomodando su legislación haciéndola más amigable, ágil y accesible para aquellos que vienen de fuera a hacer comercio o invertir dentro de sus fronteras.
Tomás Pablo Roa es presidente ejecutivo de Wolf y Pablo consultores, S. L.
Fuente: El Economista
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